miércoles, 19 de marzo de 2014

El Calendario Gregoriano y el año Bisiesto

El calendario gregoriano es un calendario originario de Europa, actualmente utilizado de manera oficial en casi todo el mundo. Así denominado por ser su promotor el Papa Gregorio XIII, vino a sustituir en 1582 al calendario juliano, utilizado desde que Julio César lo instaurara en el año 46 a. C.1 El Papa promulgó el uso de este calendario por medio de la bula Inter Gravissimas.
¿Qué pasó el 6 de octubre de 1582? ¿O el 9 del mismo mes de aquel año? ¿Y el 14? No busquen en las hemerotecas. Aquellas fechas «desaparecieron» del calendario. La noche del 4 de octubre de hace 430 años dio paso... al 15 de octubre. El nuevo calendario gregoriano corregía así el desfase de días que al cabo de milenio y medio había ido acumulando el de Julio César, conocido como «juliano».
El emperador romano había reformado el calendario el año 46 antes de Cristo, aconsejado por el astrónomo Sosígenes de Alejandría según Plinio el Viejo. Establecía el 1 de enero como el primero del año de 365 días y seis horas. Tenía un margen de error de apenas 11 minutos y 14 segundos al año. El calendario juliano creaba el año bisiesto de 366 días con un día más entre el 25 y el 24 de febrero en los años divisibles por cuatro. Al día extra se llamó «bis sextus» por ser el 24 de febrero el «sextus kalendas martii», de ahí el nombre de año bisiesto. Pero éstos se intercalaron de forma equivocada.
La Iglesia acometió la tarea de lograr un calendario más exacto que corrigiera el desfase. El primer Concilio de Nicea había fijado el momento astral en que debía celebrarse la Pascua y, a partir de ésta, el resto de las fiestas religiosas y se veía necesario ajustar el calendario civil para regular el litúrgico. Ya había habido varios intentos, pero fue en el Concilio de Trento cuando se impulsó de nuevo la corrección. En el siglo XVI el equinoccio de primavera caía el 11 de marzo, en lugar del día 21.
El Papa Gregorio XIII (1572-1585) puso en marcha una comisión científica de la que formaba parte el cronologista italiano Luis Lilio, el jesuita Christophorus Clavius, el cosmógrafo Ignazio Danti y en la que también participó el matemático hispano Pedro Chacón.
El Pontífice había ordenado levantar un observatorio en el Vaticano provisto con el mejor instrumental de la época, la denominada Torre de los Vientos en la que Danti realizó un meridiano que confirmó las correcciones del calendario con la luz solar que se filtraba a través de un agujero en la pared sue..
Los expertos coincidieron en que el año bisiesto se repitiera cada cuatro años, a excepción del último de cada siglo cuyo número de centenas no fuera múltiplo de cuatro. Así se adaptaba mejor el calendario al año solar, aunque aún existe un error de casi 26 segundos por año.

El 24 de febrero de 1582 Gregorio XIII promulgó la entrada en vigor del calendario que después se conocería por su nombre mediante la bula «Inter Gravissimas»: «Con objeto de que el equinoccio vernal, que fue fijado por los padres del Concilio de Nicea en las duodécimas calendas de abril [21 de marzo], se devuelva a dicha fecha, prescribimos y ordenamos que se eliminen de octubre del año 1582 los diez días que van del tercero después de las nonas [el día cinco] hasta el día previo a los idus [día 14], ambos incluidos. El día que seguirá a las cuartas nonas [el cuatro de octubre], en el que tradicionalmente se celebra San Francisco, serán los idus de octubre [el 15], y se celebrarán las fiestas de los mártires San Dionisio, Rústico y Eleuterio, así como la memoria de San Marco papa y confesor, y de los mártires San Sergio, Baco, Marcelo y Apuleyo».

Diez días «desaparecieron» para los países que adoptaron el calendario gregoriano. España y Portugal aplicaron la reforma el mismo día que Roma, el 4 de octubre de 1582. Las vicisitudes para la puesta en práctica de la reforma llevaron a Felipe II a firmar un año después la pragmática de Aranjuez para su adopción en todos sus territorios. Alemania continuaría con el juliano hasta 1700, Inglaterra hasta 1782, Rusia no lo cambió hasta 1918 y Grecia hasta 1923.

Línea Temporal:
Año 1582
Italia, Portugal, España (posesiones europeas y Canarias) y la zona católica de Polonia: después del jueves 4 de octubre de 1582 vino el viernes 15 de octubre.
Francia, Lorena (Lorraine) y el valle del Misisipí (Estados Unidos): después del domingo 9 de diciembre de 1582 vino el lunes 20 de diciembre.
Países Bajos (Brabante, Zelanda y el Staten Generaal): después del lunes 17 de diciembre de 1582 vino el martes 28 de diciembre.
Bélgica (Limburgo y provincias del sur): después del jueves 20 de diciembre de 1582 vino el viernes 31 de diciembre.
Año 1583
Países Bajos (Holanda, Flandes, Hennegan y algunas provincias del sur): el sábado 1 de enero de 1583 vino después del viernes 21 de diciembre de 1582 (por lo que la gente se quedó sin fiestas de Navidad ni Año nuevo).
Alemania (zonas católicas): originalmente el lunes 21 de febrero de 1583 debía suceder al domingo 10 de febrero, pero el pueblo no hizo ningún caso. Luego se decidió que el domingo 16 de octubre de 1583 seguiría al sábado 5 de octubre.
Austria (Tirol, Salzburgo y Brescia): el domingo 16 de octubre de 1583 siguió al sábado 5 de octubre.
Austria (Carintia-Kärnten y Estiria-Steiermark): el domingo 25 de diciembre de 1583 seguiría al sábado 14 de diciembre.
Países Bajos (Groninga): el lunes 21 de febrero de 1583 vino después del 10 de febrero. Retrocedieron al juliano en julio-agosto de 1594. Finalmente el miércoles 12 de enero de 1701 vino después del martes 31 de diciembre de 1700.
Año 1584
Bohemia (Bohemia, Moravia y Lusacia): el martes 17 de enero de 1584 vino después del lunes 6 de enero.
Suiza (cantones más católicos): el domingo 22 de enero vino después del 11 de enero.
Silesia (Slask): el lunes 23 de enero vino después del domingo 12 de enero.
Las posesiones españolas en América y Asia Virreinato de la Nueva España (Hoy México, Cuba y parte sur de EUA) en América de Norte y Central; la América del Sur española (Virreinato del Perú); y la Capitanía General de Filipinas): el sábado 15 de octubre de 1583 vino después del viernes 4 de octubre. Debido a la distancia con la metrópoli y la dificultad de llegar la orden de cambio a todos los lugares, Felipe II, en Pragmática del 14 de mayo de 1584, establece este año para el cambio de calendario.5 6
Año 1587
Hungría: el domingo 1 de noviembre de 1587 vino después del sábado 21 de octubre.
Año 1590
Transilvania (Siebenbürgen-Ardeal-Erdély): el martes 25 de diciembre de 1590 vino después del lunes 14 de diciembre.
Año 1605
Canadá (Nueva Escocia): desde 1605 al 13 de octubre de 1710, usaron el calendario gregoriano. Después usaron el juliano desde el 2 de octubre de 1710 hasta el miércoles 2 de septiembre de 1752, que fue seguido por el jueves 14 de septiembre. Desde entonces usaron el gregoriano.
El resto de Canadá había estado utilizando el calendario gregoriano desde su implantación original.
Año 1610
Alemania (Prusia): el jueves 2 de septiembre de 1610 vino después del miércoles 22 de agosto.
Año 1682
Francia (Estrasburgo): en febrero de 1682.
Año 1700
Alemania protestante, Dinamarca y Noruega: el lunes 1 de marzo de 1700 vino después del 18 de febrero.
Países Bajos (Güeldres-Gelderland, zona protestante de Holanda): el lunes 12 de julio de 1700 vino después del 30 de junio.
Países Bajos (Utrecht y Overijssel): el domingo 12 de diciembre de 1700 vino después del sábado 30 de noviembre.
Año 1701
Países Bajos (Frisia y otra vez Groninga) y Suiza (Zurich, Berna, Basilea, Schaffhausen, Gent, Mühlhausen y Biel): el miércoles 12 de enero de 1701 vino después del martes 31 de diciembre de 1700.
Países Bajos (Drenthe): el jueves 12 de mayo de 1701 vino después del miércoles 30 de abril.
Año 1752
Inglaterra y sus colonias (Terranova y la costa de la bahía de Hudson, en Canadá; litoral atlántico de Estados Unidos (EE.UU.), Washington y Óregon; Escocia, Irlanda, India): el jueves 14 de septiembre de 1752 vino después del miércoles 2 de septiembre.
Ésta es la causa de que aunque se dice que los escritores Miguel de Cervantes Saavedra y William Shakespeare murieron ambos el 23 de abril de 1616, en realidad este último murió 10 días después (el 3 de mayo del calendario europeo actual).
En Inglaterra, a los días en el calendario juliano que ocurrieron antes de la introducción del calendario gregoriano en 1752 se les llama OS (Old Style o 'estilo antiguo'). Las iniciales NS (New Style o 'estilo nuevo') indican el calendario gregoriano.
Año 1753
Suecia y Finlandia (que cuando fue conquistada por Rusia tuvo que adoptar en cierto grado el calendario juliano): en el año 1700 se decidió cancelar los días bisiestos durante cuarenta años, lo que lograría acumular los 10 días que faltaban. Ese año se cumplió, pero no en los bisiestos 1704 y 1708 (no se sabe por qué). Por lo tanto en esa década sus fechas no coincidían con ningún otro país (ya sea que tuviera calendario gregoriano o juliano). Más tarde, en 1712 decidieron que volverían al calendario juliano agregando un día (un "30 de febrero") al año bisiesto 1712. Cuarenta años después decidieron hacer el cambio drástico normal: el jueves 1 de marzo de 1753 vino después del miércoles 17 de febrero.
Año 1867
Alaska: octubre de 1867, cuando se convirtió en una entidad federal de Estados Unidos.
Año 1873
Japón: antes se usaba un calendario propio lunar.
Año 1875
Egipto.
Año 1912 ó 1929
China: antes tenía un calendario propio lunar. Los autores no se ponen de acuerdo si el cambio se produjo en 1912 o en 1929. Hasta hace pocos años en Hong Kong el pueblo utilizaba el calendario lunar (que es muy difícil de traducir al calendario gregoriano, el cual es estrictamente solar).
Albania: diciembre de 1912.
Año 1914 ó 1926
Turquía: hasta el 1 de enero de 1914 (según otros hasta 1926 por las reformas occidentales de Mustafa Kemal Atatürk) Turquía funcionó con el calendario islámico.
Año 1916
Bulgaria: el 14 de abril de 1916 vino después del 31 de marzo.
Año 1918
Rusia y Estonia: el jueves 14 de febrero de 1918 vino después del miércoles 31 de enero. Otras zonas orientales de la Unión Soviética lo cambiaron dos años después.
Año 1919
Rumania: el lunes 14 de abril de 1919 vino después del domingo 31 de marzo.
Yugoslavia.
Año 1923
Grecia: el jueves 1 de marzo de 1923 vino después del 15 de febrero.


Fuentes:
Artículo Calendario Gregoriano. Disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Calendario_gregoriano. Acceso en 01/03/2014.
Artículo: Los diez días que no existieron. Disponible en: http://www.abc.es/20121006/archivo/abci-diez-dias-existieron-201210031518.html

Acceso en 01/03/2014.

Sobre el Error del Calendario Civil

Era Común (EC, E.C.¨ o e. c.) y antes de la Era Común (AEC, a.E.C. o a. e. c.) son designaciones alternativas al empleo de las expresiones "después de Cristo" (d.C.; y "antes de Cristo" (a.C.). Para referirse a la Era Cristiana, el latín emplea "A.D."—anno Domini, es decir, "año del Señor".
Las designaciones Era Común y antes de la Era Común son usadas por académicos y científicos de todas las confesiones debido a su neutralidad, puesto que los términos "a.C." y "d.C." poseen un matiz religioso.
Intelectuales que no subrayan el aspecto religioso de las fechas en áreas de historia, arqueología, sociología y antropología, han utilizado en recientes décadas Era Común y antes de la Era Común.
Entre los mayores museos del mundo (como la Smithsonian Institution) también se ha popularizado la utilización de «era común». Muchas guías de referencia de centros educativos y medios de comunicación social prescriben el uso de EC.
La Ortografía de la lengua española publicada en 2011 en México ya registra las abreviaturas "e. c." (era común) y "a. e. c." (antes de la era común) e incluso registra "d. e. c." (después de la era común).7 Esto significa que hay un reconocimiento por parte de la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española acerca del uso de esta abreviatura.
Una de las razones por las cuales no se utiliza el tradicional a.C y d.C por los académicos es que existe un error en el calendario civil actual.
Hoy es comúnmente aceptado, entre historiadores y estudiosos, que el año del nacimiento de Jesucristo no fue calculado correctamente en su momento. Se habla de un error cometido por el monje Dionisio el Exiguo (siglos V-VI), a quien Roma encargó proseguir la compilación de la tabla cronológica de la fecha de Pascua preparada en tiempos del obispo Cirilo de Alejandría. El monje tomó como punto de partida la fecha de la encarnación del Señor.
El error de Dionisio radica en el hecho de que, según sus cálculos, el nacimiento de Jesús se produjo tras la muerte de Herodes, es decir, unos cuatro o seis años después de la fecha en la que realmente aconteció, que correspondería al año 748 de la fundación de Roma. Sin embargo, Flavio Josefo nos transmite que la muerte de Herodes I el Grande ocurrió después de 37 años de su reino; considerando que subió al trono en el año 40 a.C., el año de su muerte sería el 4 a.C.
Este dato lo confirma otro acontecimiento astronómico que el cronista recuerda antes de la muerte del monarca: hubo un eclipse lunar, que tuvo que ocurrir entre el 11 y el 12 de abril de 4 a.C. Por eso, si la fecha de la muerte de Herodes se produjo en el 4 a.C., Jesús no pudo nacer más tarde de ese año.
Mucho tiempo después, se descubrió que el sistema de Dionisio era inexacto, ya que había calculado erróneamente la fecha del nacimiento de Jesús. Dionisio estableció el año inicial de la era D.C. entre 5 y 7 años después del que debió haber sido, por lo que Jesús nació aproximadamente entre el año 5 a. C. y 7 a. C.
El sistema no pudo ser alterado pues la mayoría del mundo lo había aceptado, y promover un cambio tan radical sería sumamente difícil. Es por esto que al ver el nacimiento de Jesús en un año anterior al año 1 no debe sonar extraño, pues se debió a un error. No se contó el año 0, porque en la numeración romana ni en la griega hay 0.

Fuentes:
Artículo: Natividad. Disponible en http://es.wikipedia.org/wiki/Natividad. Acceso en 01/03/2014.
Artículo: Fecha del Nacimiento de Jesús. Santuario de Belén. Disponible en: http://www.belen.custodia.org/default.asp?id=173. Acceso en 01/03/2014.

Artículo: Era Común. Disponible en http://es.wikipedia.org/wiki/Era_Com%C3%BAn. Acceso en 01/03/2014.

martes, 18 de marzo de 2014

Cosmología: La Naturaleza

Lectura tomada del libro: Invirtiendo ahora, disfrutando siempre.
Por: Marcelo M. Guimarães.

Creo que todo ser humano, por más simple que sea, ya se ha preguntado a sí mismo: ¿Quién soy yo? ¿De donde yo vine? ¿A dónde voy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué nací aquí?. Otros han ido quizás más lejos y se preguntarán: ¿Por qué este universo existe? ¿Cuál es la edad del Universo? ¿Nuestro universo es el único o apenas es uno entre millones? ¿Por qué el hombre es diferente de todos los animales? ¿Por qué tenemos libre albedrío? ¿Qué nos hace percibir, si nadie nos enseñó, el concepto del bien y del mal? ¿Por qué el hombre busca entender la eternidad? Finalmente ¿Existe un creador de todas esas cosas? Si no, ¿cómo y qué produce la evolución de las cosas y de los seres dentro de una lógica inconmensurable? Si no existe una Inteligencia Superior que nos explica la razón de las cosas, ¿por qué el ojo de todo ser viviente está en la frente y no en la cola? ¿Será que fue una lógica del azar que colocó ojos, nariz, boca juntos en la parte frontal de la cabeza? ¿Será que la primera instrucción sería ver, oler y comer? ¿Será que existe vida solamente en la tierra? ¿Cómo y cuando el Universo comenzó y cuando va a acabar? ¿De qué esta hecha la materia “oscura” del universo? Podríamos seguir preguntando y preguntando sobre el por qué de muchas cosas…
                                            
El Origen del Universo según la ciencia.
Según algunos científicos e investigadores, el universo nació al azar, por un mal funcionamiento del vacío que le precedió. La nada existía antes del universo, argumentan otros, en un ambiente en que partículas de energía opuestas pasaban “días” anulándose mutuamente, como un juego de tenis que siempre termina empatado, o que nunca termina. Un día, no se sabe por qué, un tipo de partícula desempató el juego y predominó sobre las demás, creando la masa original que resultó en la grande explosión primordial e ocasional conocida como el “Big Bang” (creada en 1946 por George Gamow). Así, se dieron una cadena de explosiones, formando el Universo. Según Gamow, en un estado inicial, la materia estaba disociada en sus elementos más elementales que interactuaban ferozmente. Esta “sopa cósmica” era compuesta principalmente de protones, neutrones, electrones y fotones”. Podríamos continuar meditando sobre la teoría de Gamow, sin embargo, vamos a detenernos por aquí, haciéndonos una pregunta crucial: ¿Pero, cómo aparecieron esas partículas? ¿De la nada? ¿La nada (por sí misma) puede producir alguna cosa? La verdad es que existen varias respuestas que circulan por ahí, pero ninguna de ellas, hasta ahora, es conclusiva y final. O sea, continuamos sin explicaciones.
Y es que apareció el planeta tierra con una órbita definida, precisa, cuyos movimientos propios en torno al sistema solar se producen en un tiempo determinado en millonésimas de segundo, minutos y horas, el día, la noche, las estaciones, y los demás fenómenos naturales. Por otro lado, sabiamente “Alguien” que los científicos no conocen y no explican el por qué y cómo, determinó que en las extremidades de la tierra, en los polos, el sol no fuese tan fuerte, formando entonces, enormes hieleras naturales que enfrían las aguas y hasta el propio planeta. La teoría del Big Bang ni siquiera puede postular teorías para explicar tales sucesos y fenómenos, pues esa teoría afirma que todo fue por la fuerza del acaso y del azar. Pero, ¿qué azar… me pregunto yo? La verdad es que el hombre se siente muy pequeño y sin respuestas para explicar todo esto.
¿Será que todo lo que existe fue por azar y que luego llegó a un orden? ¿O será que alguien, un ser supremo, creó los cielos y la tierra? ¿Será que alguien colocó orden a este universo?
Algunos científicos o hasta cristianos que apoyan la teoría del Big Bang dan algunas pruebas: “En la Biblia cristiana aparecen dos versículos que hablarían del big bang y el big crunch: «Él está sentado sobre el círculo de la tierra, cuyos moradores son como langostas; él extiende los cielos como una cortina, los despliega como una tienda para morar» (Isaías 40.22). «Y todo el ejército de los cielos se disolverá, y se enrollarán los cielos como un libro; y caerá todo su ejército como se cae la hoja de la parra, y como se cae la de la higuera» (Isaías 34.4)”.  Sin embargo, aún se menciona a Dios como ese “Creador”.
La otra teoría y creencia que existe para explicar todo el origen del universo es la propia Biblia. Creo que en este momento, se hace necesario averiguar lo que dice la Biblia sobre todo esto, pues si por un lado, no hay quien nos explique convincentemente el origen del Universo, tenemos entonces que continuar analizando y meditando en otras hipótesis.
Origen de la vida:
La belleza de las plantas, las variedades de las especies, la simetría de los colores de las flores, el ciclo de la vida, la reproducción y la combinación entre las especies son casi increíbles para algunos e imperceptibles para otros. ¿Cómo puede una semilla sobrevivir por años? ¿Qué tiene dentro de ella que determina todas las características de una planta adulta? ¿Cómo son hechos los sabores de los frutos? ¿Cómo son formadas y sintetizadas las vitaminas y las sales minerales? ¿Por qué algunos se combinan y otros no? ¿Será que las llamadas altas temperaturas producidas por el Big Bang formaron todos los elementos químicos y las leyes que lo rigen? ¿Por qué existen árboles que dan frutos? ¿Cómo son regidos los códigos genéticos que determinan el tamaño, la espesura de los tallos, los colores de las flores y de las hojas en millones y millones de tonalidades? ¿Quién creó la ley de la fotosíntesis, promoviendo la absorción de Dióxido de carbono y la producción de oxígeno? ¿Por qué el hombre nunca consiguió crear una nueva semilla partiendo de la nada?

Es interesante notar que todo lo que la planta tiene, la tierra también lo tiene. O sea, todo elemento químico contenido en una planta, también existe en el suelo. Es la ley de la similitud fue determinada por una Palabra: “

La ciencia aún no ha encontrado el «eslabón perdido» Leer más: La ciencia aún no ha encontrado el «eslabón perdido»

Un estudio que ha analizado más de mil piezas dentales fósiles -muchas del yacimiento de Atapuerca- concluye que aún no se ha encontrado el "eslabón perdido", es decir, el ancestro común entre neandertales y sapiens, y anima a buscar en los fósiles africanos de hace un millón de años.
El trabajo, que se publica esta semana en la revista Proceeding of the National Academy of Science (PNAS), establece que la búsqueda del ancestro común de los humanos modernos y los neandertales, que vivieron en Europa hace miles de años, aún no se ha completado.
Además, presenta evidencias de que las líneas que dieron lugar a las dos especies se separaron hace casi un millón de años, mucho antes de lo que sugieren los estudios basados en evidencias moleculares.
En este estudio -titulado "Ausencia de coincidencia en la morfología dental del último antecesor común entre neandertales y humanos modernos"- se analizan fósiles dentales de 13 especies de homínidos, lo que ha permitido observar que ninguno de los candidatos se ajusta al perfil esperado en el antepasado de neandertales y sapiens.
La primera autora del artículo, Aída Gómez-Robles, que actualmente trabaja en el Centro para el Estudio Avanzado de Paleobiología Homínida, de la Universidad George de Washington, afirma que sus "resultados llaman la atención sobre la gran discrepancia que existe entre las estimaciones moleculares y paleontológicas del momento en el que se separaron ambas especies".
La primera firmante del estudio realizó su tesis doctoral en la Universidad de Granada y en el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), donde trabajó con José María Bermúdez de Castro, quien es también autor del artículo junto con Juan Luis Arsuaga y Eudald Carbonell, los tres codirectores de las excavaciones en los yacimientos de Atapuerca.
Para llegar a esta conclusión de que ninguna de las especies candidatas corresponde con el ancestro común, los investigadores han estudiado unos 1.200 molares y premolares fósiles, muchos de ellos procedentes de Atapuerca, mediante análisis morfométricos y técnicas estadísticas desarrolladas por la bióloga Emilia Martins de la Universidad de Indiana.
El estudio también muestra que las potenciales especies ancestrales descubiertas en Europa son morfológicamente más similares a los neandertales que a los humanos modernos, lo que sugiere que el linaje neandertal apareció hace en torno a un millón de años.
Esto supone que la divergencia de este linaje tuvo lugar antes de lo que se pensaba, que hasta ahora era de hace 350.000 años según algunos estudios.
El estudio concluye que las respuestas a la cuestión de los ancestros podrían venir del estudio de las especies de homínidos africanos, a pesar de que el registro fósil africano de la época de interés sea escaso.
En declaraciones que ha facilitado el Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana, David Polly ha afirmado que el estudio dice que aún "hay hallazgos esperándonos", y los fósiles africanos de una antigüedad aproximada de un millón de años merecen una especial atención como posibles ancestros de los neandertales y los humanos modernos.


Leer más:  La ciencia aún no ha encontrado el «eslabón perdido» - La Razón digital  http://www.larazon.es/detalle_normal/noticias/4060665/la-ciencia-aun-no-ha-encontrado-el-eslabon-perdido#Ttt1AFbrD4bb7DDS
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La Cronología del Eslabón Perdido

Por: Ministerio de Apologética e investigación Cristiana (MAIC)
Disponible en: http://www.maic.net/evolucion/cronologia.htm

     Lo que sigue es una lista del supuesto registro evolutivo del hombre. Si el evolucionismo es cierto, entonces debiera existir evidencia de él. Empero, la evidencia es muy débil, como veremos.

  • Ramapithecus hace 14 a 10 millones de años
  • Australopithecus hace 4 a 1 millones de años
  • Australopithecus afarensis hace 3,6 a 3 millones de años
  • Australopithecus africanus hace 3 a 2,5 millones de años
  • Australopithecus robustus hace 3 a 1,8 millones de años
  • Australopithecus boisei hace 1,8 millón de años
  • 3. Zinjanthropus
  • También conocido como el hombre de Africa oriental hace 2 a 1,5 millones de años
  • Homo habilis hace 2 millones de años
  • Pithecanthropus hace 500 000 años
  • Hombre de Nebraska, conocido también como Hesperopithecus haroldcookii
  • Hombre de Piltdown, también conocido como Eanthropus dawsoni, u hombre de Dawn.
  • Homo erectus hace 300 000 años.
  • También conocido como hombre de Java
  • También conocido como hombre de Pekín o Sinjanthropus pekinensis
  • Homo Sapiens
  • Neanderthal hace 30 000 a 75 000 años
  • Cro Magnum hace 10 000 a 50 000 años
  • Moderno hace 10 000 años
  • Homo Sapiens presente
  • Ramapithecus

     El Ramapithecus consiste meramente en un puñado de dientes y fragmentos de quijada. El Ramapithecus era considerado un homínido (ancestro evolutivo del hombre) solamente sobre la base de sus características dentales [E. L. Simons, Annals of the New York Academy of Sciences, Vol. 167, p. 319 (1969); E. L. Simons, Scientific American, Vol. 211, p. 50 (1964); D. R. Pilbeam, Nature, Vol. 219, p. 1335 (1968); E. L. Simons and D. R. Pilbeam, Science, Vol. 173, p. 23 (1971). David Pilbeam, quien fue uno de los primeros en afirmar que el Ramapithecus era un homínido dijo que ahora no está tan seguro de que el Ramapithecus fuese un ancestro de los humanos. Dijo que había hallado nuevos fósiles de la especie que invalidan conclusiones previas [New York Times, 18 de febrero de 1979 (Section L, p. 41).

Australopithecus
     El primer hallazgo de esta criatura lo hizo Dart en 1924. Su nombre completo es Australopithecus Africanus. El hallazgo consistió en un cráneo, mandíbula y dientes, con fragmentos de la pelvis, miembros y pie. Los Australopithecinos se clasifican en dos especies principales: Australopithecus Africanus y Australopithecus Robustus. Se considera que el Australopithecus no es un ancestro del humano. [C. Oxnard, University of Chicago Magazine, Winter, 1974, pp. 11-22; A. Montagu, Man: His First Million Years (El hombre: su primer millón de años), World Publishers, Yonkers, N.Y., 1957, pp. 51-52].

Zinjanthropus
     En 1950 Louis y Mary Leakey hallaron 400 fragmentos de un cráneo en el cañon Olduvai, en el Africa. Dijeron que era un ancestro homínido de 1 750 000 años de antigüedad. Se determinó dicha edad por la datación de las rocas en las cuales se hallaron los fragmentos óseos, según el método de potasio –argón. En 1960 los mismos investigadores hallaron el cráneo de un niño con características más humanas, en un estrato rocoso 30 cm inferior. Entonces Leakey dijo que el Zinjanthropus no era un homínido, sino completamente simio. La datación con carbono 14 de huesos de mamífero en el mismo estrato sugiere una edad de solamente 10 000 a 3 100 años.

Hombre de Nebraska
     En 1922 un geólogo llamado Cook halló un diente en la Quebrada de la Serpiente, en Nebraska (EE.UU.). El profesor Osborn, con el Museo de Nueva York, y Sir Smith, de Londres, dijeron que el diente pertenecía a un homínido. Posteriormente se determinó que era el diente de una especie extinguida de cerdo . S. K. Gregory, Science Vol. 66, p. 579 (1927), citado en Evolution the Fossils Say No (Evolución: Los fósiles dicen No), p. 130, por Duane T. Gish, Ph.D. Creation Life Publishers, 1981, San Diego. CA.

Hombre de Piltdown
      En 1912 Charles Dawson y otros hallaron una bóveda craneana, una quijada y dientes en una ripiera de Sussex (Inglaterra). A partir de estos restos, reconstruyeron un hombre simiesco que llamaron hombre de Piltdown y dataron 500 000 años a.C. En 1953 científicos británicos descubrieron que la quijada pertenecía a un mono y había sido coloreada para simular antigüedad. Los dientes habían sido limados para que pareciesen humanos. La "bóveda craneana" era en realidad un hueso de la rodilla de un elefante. La falsificación engañó a los expertos por muchos años. S. Zuckerman, Beyond the Ivory Tower (más allá de la torre de marfil), Taplinger Pub. Co., New York, 1970, pp. 75-94, citado en Evolution the Fossils Say No (Evolución: Los fósiles dicen No), p.132, por Duane T. Gish Ph.D. Creation Life Publishers, 1981 San Diego. CA.

El hombre de Java
     En 1892 Dubois halló en Java una bóveda craneana, dientes y un fémur, a una distancia aproximada de 18 metros uno de otros. Afirmó que pertenecían a un mismo ancestro homínido y que su edad era de cerca de 500 000 años. Dubois omitió mencionar que en virtualmente el mismo nivel de excavación él había hallado dos cráneos humanos. En 1908 la expedición alemana Selenka halló que los flujos de lava en Java tornaban imposible una edad superior a los 500 años. En 1936 Dubois finalmente admitió que el "hombre de Java" no era sino un simio. W. Howell, Mankind in the Making (La hechura de la humanidad), Doubleday and Co., Garden City, N.T. 1967, pp. 155-156 citado en Evolution the Fossils Say No (Evolución: Los fósiles icen No), p. 125, por Duane T. Gish Ph.D. Creation Life Publishers, 1981 San Diego. CA.

El hombre de Pekín
     Entre 1922 y 1939 se descubrieron huesos pertenecientes a 38 individuos en Choukoutien, al suroeste de Pekín. Experos de diferentes países dijeron que pertenecían a homínidos. Msgr. O’Connell, misionero en la China, sostiene que el lugar era una fosa de cal, y que los humanos mataban monos para comer sus sesos. Cuando el cerro se colapsó, la gente quedó enterrada y se fosilizó. La mezcla de huesos de simios y monos se usó para crear un homínido. Los especímenes originales se perdieron durante la Segunda Guerra Mundial. O’Connell dice que el "hombre de Pekín" es completamente humano.

El hombre de Neanderthal
     Los primeros huesos del hombre de Neanderthal fueron hallados en Dusseldorf (Alemania) en 1856. Indican una postura semi-erecta. Se dijo que estaba un escalón por encima de los simios y se lo dató en 200 000 años. Posteriormente se halló que sufría de artritis. Desde entonces se han hallado esqueletos que indican una posición erecta en cuevas de Palestina. Su cerebro tenía mayor tamaño que el del hombre moderno.

El hombre de Cro-magnon
     Se han hallado huesos del hombre de Cro-Magnon en cuevas de Francia. Se los data en 50 000 años. El tamaño cerebral del hombre de Cro-Magnon es mayor que el del hombre moderno.

     La información aquí presentada apenas rasguña la superficie de algunos de los problemas de la teoría de la evolución.
     Para mayor información que documenta y trata evidencia contraria a la evolución, los siguientes libros pueden ser útiles:

  • Darwin’s Enigma (El enigma de Darwin), por Luther D. Sunderland, Master Book Publishers, Santee, CA 1984
  •  
  • Evolution The Fossils say No! (Evolución: Los fósiles dicen ¡No!), por Duane T. Gish, Ph.D. Creation Life Publishers, San Diego, CA. 1981.
  •  
  • The Truth: God or Evolution? (La verdad: ¿Dios o la evolución?), por Marshall y Sandra Hall, The Craig Press, 1974.
  •  
  • Man’s Origin, Man’s Destiny (El origen del hombre, el destino del hombre), por A. E. Wilder-Smith, Bethany House Publishers, Minneapolis, Minnesota, 55438, 1975.
  •  
  • [Nota del traductor: Otros libros recientes sobre el mismo tema se listan a continuación]
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  • Proceso a Darwin, 2ª Ed., por Philip E. Johnson. Grand Rapids, Portavoz, 1995.
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  • Los hombres-simios - ¿Realidad o ficción?, por Malcolm Bowden. Terrassa, CLIE, 1984.
  •  
  • The collapse of evolution (El colapso de la evolución), 2nd Ed., por Scott M. Huse. Grand Rapids, Baker Books, 1993.
  •  
  • Defeating Darwinism by opening minds (Cómo derrotar al darwinismo abriendo las mentes), por Philip E. Johnson . Downers Grove, InterVarsity Press, 1997.
  •  
  • Bones of contention. A creationist assessment of human fossils (Huesos en discusión. Una evaluación creacionista de los fósiles humanos), por Marvin L. Lubenow. Grand Rapids, Baker Books, 1992.
  •  
  • Darwin’s black box: The biochemical challenge to evolution (La caja negra de Darwin: El desafío bioquímico a la evolución) por Michael Behe. New York, Free Press, 1996.

Hay muchos problemas con la Teoría de la Evolución

Por: Ministerio de Apologética e Investigación Cristiana (MAIC)
Disponible en: http://www.maic.net/evolucion/problemas.htm

Primero, está el problema de que la vida haya surgido espontáneamente "de la nada". Para que la vida surgiese por azar (ver la página 000 sobre la improbabilidad matemática de que esto ocurriese) se hubiese requerido una increíble cantidad de tiempo y una increíble cantidad de combinaciones de moléculas. Auqnue muchos científicos dicen que ambas condiciones se dieron en la tierra, esto es matemáticamente hablando, virtualmente imposible. Discutiremos esto luego.
     En segundo lugar, está el problema de la formación continuada de nuevo material genético. El desarrollo de nuevo material genético dentro de los organismos es también un problema muy serio. La molécula de ADN es tan compleja que es básicamente imposible que una aparezca por azar.
     [Nota del Traductor: El ADN o ácido desoxirribonucleico es la molécula fundamental del código genético. Se organiza en genes, muchos de los cuales codifican proteínas; los genes se organizan en cromosomas en las especies que poseen núcleo celular (eucariotas). El ADN está formado por nucleótidos, que son compuestos de una base cíclica o nucleósido, un azúcar (desoxirribosa, de ahí el nombre "ADN") y un residuo fosfato. Los nucleótidos se disponen lado a lado formando una cadena de miles o millones de ellos. En el ADN hay solamente cuatro nucleótidos, a saber: adenosina, citosina, guanina y timidina. En realidad el ADN consta de dos cadenas que forman una hélice. En ella, la adenosina de una de las cadenas siempre se liga con una timidina de la otra, y la guanina siempre se liga con una citosina de la otra. Por tanto, se dice que las cadenas son complementarias, ya que conociendo la estructura de una cadena se puede reconstruir la otra (hecho fundamental en la reproducción de la célula). Desde el punto de vista formal, el ADN posee un lenguaje con sus propias palabras, gramática y reglas de puntuación. Un grupo de tres nucleótidos o codón especifica un aminoácido determinado. Los aminoácidos son los compuestos que forman las proteínas. Una secuencia de codones puede, por tanto, especificar la cadena de aminoácidos de una proteína. Existen 64 codones posibles; 61 codifican aminoácidos y los restantes sirven como signos de puntuación. En el ADN presente en una célula, se encuentra la información necesaria para la construcción de todas las proteínas propias de la especie a la cual la célula pertenece. Es como una gran biblioteca de referencia, la cual es selectivamente leída y copiada (como ARN o ácido ribonucleico) para producir las proteínas que determinan la estructura y función celular. El conjunto de genes de una especie se denomina genoma. El genoma humano, por ejemplo, consta de cerca de tres mil millones de pares de bases. ]
     En tercer lugar, está el problema de la línea ancestral de la especie humana, la cual está llena de lagunas. La evidencia histórica acerca de la línea de los ancestros de los seres humanos (o linaje de los homínidos) puede clasificarse en tres categorías: simio puro, hombre puro, y fraudes. Esto significa que el linaje evolutivo del hombre en realidad no existe. Hay enormes huecos. Usted ha oído la expresión "el eslabón perdido". Lo que no ha oído seguramente es el "eslabón descubierto" o el "eslabón hallado." Esto es porque hasta ahora sigue sin ser hallado.

     En cuarto lugar, está el problema de los eslabones perdidos de todas las otras especies. Ninguno de los linajes evolutivos de cualquier animal terrestre, ave o pez , ni de los vegetales, ha sido establecido. Todos aparecen repentinamente. Es por esta razón que se propuso una teoría llamada de equilibrio interrumpido. Afirma que la razón de que no haya fósiles de los eslabones evolutivos entre las especies es que la evolución tuvo lugar en grandes saltos, con incrementos cada 100 mil a 300 mil años durante diferentes períodos de la historia terrestre. Esto es revelador porque implica la admisión por parte de los científicos de que el registro fósil es tan incompleto que era necesario formular una teoría que explicase los grandes paréntesis que regularmente aparecen.